<description>El a&amp;ntilde;o 69 d.C. es uno de los m&amp;aacute;s agitados y ca&amp;oacute;ticos de la historia del imperio romano. En poco m&amp;aacute;s de un a&amp;ntilde;o, cuatro hombres se hicieron con el trono tras la muerte de Ner&amp;oacute;n: Galba, Ot&amp;oacute;n, Vitelio y Vespasiano. Este per&amp;iacute;odo demostr&amp;oacute; que, una vez desaparecido el prestigio de la dinast&amp;iacute;a julio-claudia, el Senado era ya un mero &amp;oacute;rgano decorativo y la dignidad imperial depend&amp;iacute;a exclusivamente de contar con el apoyo de las legiones.

Ner&amp;oacute;n se suicid&amp;oacute; el 9 de junio del a&amp;ntilde;o 68. Sin heredero, el vac&amp;iacute;o de poder desat&amp;oacute; una guerra civil. El primer beneficiario fue Servio Sulpicio Galba, gobernador de la Tarraconense. Hombre de linaje patricio y 73 a&amp;ntilde;os, fue reconocido por el Senado y la Guardia Pretoriana. Lleg&amp;oacute; a Roma en octubre de ese a&amp;ntilde;o, pero su gobierno fue un desastre desde el primer d&amp;iacute;a: recort&amp;oacute; gastos, se neg&amp;oacute; a pagar el donativo prometido a los pretorianos y adopt&amp;oacute; como heredero a Lucio Calpurnio Pis&amp;oacute;n, un arist&amp;oacute;crata sin carisma ni apoyos militares. Tres meses m&amp;aacute;s tarde las legiones de Germania Superior e Inferior se sublevaron y proclamaron emperador a Aulo Vitelio. Cuando la noticia lleg&amp;oacute; a Roma los pretorianos asesinaron a Galba y a Pis&amp;oacute;n en pleno Foro. El Senado, aterrorizado, proclam&amp;oacute; emperador a Marco Salvio Ot&amp;oacute;n.

Ot&amp;oacute;n, antiguo compa&amp;ntilde;ero de juergas de Ner&amp;oacute;n y gobernador de Lusitania, ten&amp;iacute;a el apoyo del Pretorio y de parte del pueblo romano. Intent&amp;oacute; negociar con Vitelio, que ya marchaba hacia Italia con sus legiones. La negociaci&amp;oacute;n fracas&amp;oacute;. El 14 de abril del a&amp;ntilde;o 69 se libr&amp;oacute; la primera batalla de Bedriacum (cerca de Cremona). Las tropas de Ot&amp;oacute;n fueron aplastadas. Al recibir la noticia, Ot&amp;oacute;n se suicid&amp;oacute;, pero no sin antes pronunciar una frase que ha pasado a la historia: &amp;ldquo;Es m&amp;aacute;s justo que muera uno por todos, que todos por uno&amp;rdquo;. Hab&amp;iacute;a reinado 91 d&amp;iacute;as.

Vitelio entr&amp;oacute; en Roma en julio entre desfiles, banquetes y celebraciones. Su gobierno fue un espect&amp;aacute;culo de despilfarro y crueldad: ejecuciones masivas de oficiales fieles a Ot&amp;oacute;n, disoluci&amp;oacute;n de las cohortes pretorianas para sustituirlas por sus tropas germanas y un despilfarro que dej&amp;oacute; exhausto el tesoro imperial. Entretanto, en Oriente, las legiones de Judea, Siria y Egipto proclamaron emperador a Tito Flavio Vespasiano, el general que se encargaba en esos momentos de la revuelta jud&amp;iacute;a. Vespasiano controlaba los env&amp;iacute;os de grano de Egipto y ten&amp;iacute;a el apoyo de su hijo Tito y del prefecto de Egipto, Tiberio Julio Alejandro.

Las legiones del Danubio que estaban al mando de Marco Antonio Primo invadieron Italia en octubre. A finales de ese mes se libr&amp;oacute; la segunda batalla de Bedriacum y las tropas de Vitelio fueron aniquiladas. En diciembre, Antonio Primo entr&amp;oacute; en Roma. Vitelio intent&amp;oacute; abdicar y esconderse, pero fue descubierto, arrastrado desnudo por las calles y arrojado al T&amp;iacute;ber tras ser torturado. El d&amp;iacute;a 21 de diciembre del a&amp;ntilde;o 69, el Senado proclam&amp;oacute; a Vespasiano, que a&amp;uacute;n estaba en Alejandr&amp;iacute;a. Con &amp;eacute;l comenz&amp;oacute; la dinast&amp;iacute;a Flavia. 

Para hablar de este a&amp;ntilde;o tan importante en la historia de la Antigua Roma nos acompa&amp;ntilde;a hoy Federico Romero, que ya pas&amp;oacute; por aqu&amp;iacute; hace unos meses para hablarnos de aquellos b&amp;aacute;rbaros que se significaron en su defensa del imperio. Hoy nos vamos cuatro siglos atr&amp;aacute;s al momento en el que Roma estaba en la c&amp;uacute;spide de su poder. 

Bibliograf&amp;iacute;a:

&amp;ldquo;En defensa de Roma&amp;rdquo; de Federico Romero - https://amzn.to/48zc0AZ
&amp;ldquo;El a&amp;ntilde;o de los cuatro emperadores&amp;rdquo; Desperta Ferro - https://www.despertaferro-ediciones.com/revistas/numero/72-69-d-c-el-ano-de-los-cuatro-emperadores-roma-vespasiano/
&amp;ldquo;El imperio romano&amp;rdquo; de Isaac Asimov - https://amzn.to/3XEwa7w
&amp;ldquo;Rome: An Empire's Story&amp;rdquo; de Greg Woolf - https://amzn.to/4rFaTrZ &lt;a href="https://www.ivoox.com/ano-cuatro-emperadores-audios-mp3_rf_163784016_1.html"&gt;Escucha el episodio completo&lt;/a&gt; en la app de iVoox, o descubre todo el catálogo de &lt;a href="https://www.ivoox.com/originals"&gt;iVoox Originals&lt;/a&gt; </description>

La ContraHistoria

Fernando Díaz Villanueva

El año de los cuatro emperadores

DEC 5, 202574 MIN
La ContraHistoria

El año de los cuatro emperadores

DEC 5, 202574 MIN

Description

El a&ntilde;o 69 d.C. es uno de los m&aacute;s agitados y ca&oacute;ticos de la historia del imperio romano. En poco m&aacute;s de un a&ntilde;o, cuatro hombres se hicieron con el trono tras la muerte de Ner&oacute;n: Galba, Ot&oacute;n, Vitelio y Vespasiano. Este per&iacute;odo demostr&oacute; que, una vez desaparecido el prestigio de la dinast&iacute;a julio-claudia, el Senado era ya un mero &oacute;rgano decorativo y la dignidad imperial depend&iacute;a exclusivamente de contar con el apoyo de las legiones. Ner&oacute;n se suicid&oacute; el 9 de junio del a&ntilde;o 68. Sin heredero, el vac&iacute;o de poder desat&oacute; una guerra civil. El primer beneficiario fue Servio Sulpicio Galba, gobernador de la Tarraconense. Hombre de linaje patricio y 73 a&ntilde;os, fue reconocido por el Senado y la Guardia Pretoriana. Lleg&oacute; a Roma en octubre de ese a&ntilde;o, pero su gobierno fue un desastre desde el primer d&iacute;a: recort&oacute; gastos, se neg&oacute; a pagar el donativo prometido a los pretorianos y adopt&oacute; como heredero a Lucio Calpurnio Pis&oacute;n, un arist&oacute;crata sin carisma ni apoyos militares. Tres meses m&aacute;s tarde las legiones de Germania Superior e Inferior se sublevaron y proclamaron emperador a Aulo Vitelio. Cuando la noticia lleg&oacute; a Roma los pretorianos asesinaron a Galba y a Pis&oacute;n en pleno Foro. El Senado, aterrorizado, proclam&oacute; emperador a Marco Salvio Ot&oacute;n. Ot&oacute;n, antiguo compa&ntilde;ero de juergas de Ner&oacute;n y gobernador de Lusitania, ten&iacute;a el apoyo del Pretorio y de parte del pueblo romano. Intent&oacute; negociar con Vitelio, que ya marchaba hacia Italia con sus legiones. La negociaci&oacute;n fracas&oacute;. El 14 de abril del a&ntilde;o 69 se libr&oacute; la primera batalla de Bedriacum (cerca de Cremona). Las tropas de Ot&oacute;n fueron aplastadas. Al recibir la noticia, Ot&oacute;n se suicid&oacute;, pero no sin antes pronunciar una frase que ha pasado a la historia: &ldquo;Es m&aacute;s justo que muera uno por todos, que todos por uno&rdquo;. Hab&iacute;a reinado 91 d&iacute;as. Vitelio entr&oacute; en Roma en julio entre desfiles, banquetes y celebraciones. Su gobierno fue un espect&aacute;culo de despilfarro y crueldad: ejecuciones masivas de oficiales fieles a Ot&oacute;n, disoluci&oacute;n de las cohortes pretorianas para sustituirlas por sus tropas germanas y un despilfarro que dej&oacute; exhausto el tesoro imperial. Entretanto, en Oriente, las legiones de Judea, Siria y Egipto proclamaron emperador a Tito Flavio Vespasiano, el general que se encargaba en esos momentos de la revuelta jud&iacute;a. Vespasiano controlaba los env&iacute;os de grano de Egipto y ten&iacute;a el apoyo de su hijo Tito y del prefecto de Egipto, Tiberio Julio Alejandro. Las legiones del Danubio que estaban al mando de Marco Antonio Primo invadieron Italia en octubre. A finales de ese mes se libr&oacute; la segunda batalla de Bedriacum y las tropas de Vitelio fueron aniquiladas. En diciembre, Antonio Primo entr&oacute; en Roma. Vitelio intent&oacute; abdicar y esconderse, pero fue descubierto, arrastrado desnudo por las calles y arrojado al T&iacute;ber tras ser torturado. El d&iacute;a 21 de diciembre del a&ntilde;o 69, el Senado proclam&oacute; a Vespasiano, que a&uacute;n estaba en Alejandr&iacute;a. Con &eacute;l comenz&oacute; la dinast&iacute;a Flavia. Para hablar de este a&ntilde;o tan importante en la historia de la Antigua Roma nos acompa&ntilde;a hoy Federico Romero, que ya pas&oacute; por aqu&iacute; hace unos meses para hablarnos de aquellos b&aacute;rbaros que se significaron en su defensa del imperio. Hoy nos vamos cuatro siglos atr&aacute;s al momento en el que Roma estaba en la c&uacute;spide de su poder. Bibliograf&iacute;a: &ldquo;En defensa de Roma&rdquo; de Federico Romero - https://amzn.to/48zc0AZ &ldquo;El a&ntilde;o de los cuatro emperadores&rdquo; Desperta Ferro - https://www.despertaferro-ediciones.com/revistas/numero/72-69-d-c-el-ano-de-los-cuatro-emperadores-roma-vespasiano/ &ldquo;El imperio romano&rdquo; de Isaac Asimov - https://amzn.to/3XEwa7w &ldquo;Rome: An Empire's Story&rdquo; de Greg Woolf - https://amzn.to/4rFaTrZ <a href="https://www.ivoox.com/ano-cuatro-emperadores-audios-mp3_rf_163784016_1.html">Escucha el episodio completo</a> en la app de iVoox, o descubre todo el catálogo de <a href="https://www.ivoox.com/originals">iVoox Originals</a>