<description>Como dijo el profeta Rodolfo Bodipo, &amp;iexcl;arriba los corazones! &amp;iexcl;Cu&amp;aacute;nto sufrimos, Mart&amp;iacute;n! Podcast dice adi&amp;oacute;s al miedo, au revoir a la cautela, auf wiederhesen a la desconfianza, hello happiness y goodbye loneliness. Ser&amp;aacute; la vitamina C de la pi&amp;ntilde;a, ser&amp;aacute; su aroma tropical, ser&amp;aacute; la perspectiva de un saltito sin fin, ser&amp;aacute; reconocerse en posadolescentes blanquiazules que se disparan como balas por las bandas de Riazor y se besan el escudo, ser&amp;aacute; una enajenaci&amp;oacute;n transitoria causada por tantos momentos de desasosiego o ser&amp;aacute; que con el paso de los a&amp;ntilde;os uno es m&amp;aacute;s consciente de que los breves momentos de felicidad plena no se cuestionan: se disfrutan duren lo que duren. &amp;iquest;Qu&amp;eacute; ha cambiado aqu&amp;iacute; para que el m&amp;aacute;s mustio de los Deportivos, acaso el peor que recuerden los archivos polvorientos de la D&amp;eacute;porcueva secreta de Rub&amp;eacute;n Ventureira, se haya transformado en el equipo m&amp;aacute;s en racha del f&amp;uacute;tbol continental hasta el punto de que si ma&amp;ntilde;ana un directivo de la UEFA se emborracha con Bitter Kas y le concede un puesto en las rondas eliminatorias de la Champions League, es muy capaz de destrozar cualquier l&amp;oacute;gica, despachar al Manchester City con la misma suficiencia con la que golea a todo un Fuenlabrada y a toda una SD Logro&amp;ntilde;&amp;eacute;s (no hay rival peque&amp;ntilde;o) y alzarse con la Copa? Ojal&amp;aacute; que lo que haya cambiado sea la suerte pues las desgracias recientes de El Mejor Club del Mundo (marca registrada) no se pueden explicar totalmente por la impericia competitiva y s&amp;iacute;, en un porcentaje alto, por una fatalidad continuada que solo puede ser el reverso a tanto gozo vivido en las d&amp;eacute;cadas anteriores. Por eso cuando sale cara ya no se puede pensar en que en la pr&amp;oacute;xima tirada de la moneada tal vez asome la cruz: hay que abrirse la camisa y recibir toda esta alegr&amp;iacute;a en el pecho. Benjam&amp;iacute;n y Manuel, ebrios de gozo, eligen creer, eligen una racha hist&amp;oacute;rica, eligen un ascenso para las &amp;eacute;pocas, eligen una Coru&amp;ntilde;a convertida en capital mundial de la pi&amp;ntilde;a, eligen unos meses de eterno carnaval y eligen no perder un solo segundo en razonar que quiz&amp;aacute;s no hay que venirse tan arriba tan pronto. Pero como dice el meme de Internet en el que alguien cierra con sus dedos los labios de una persona dispuesta a criticar, &amp;ldquo;let people enjoy things&amp;rdquo; (o &amp;ldquo;dejad que los chicos camelen&amp;rdquo;, en fariense). &amp;iquest;Que le dimos al bot&amp;oacute;n de grabar y acto seguido el D&amp;eacute;por Juvenil fue derrotado en una isla sin nombre? &amp;iquest;Que tenemos una genitalia hipertrofiada por atrevernos a publicar esto antes de medirnos al Tarazona y arriesgar una deportiveada? Pues puede ser. Pero dejen a estos pollaviejas sabrosones disfrutar mientras saludan al platillo volante en forma de anan&amp;aacute;s y gritan &amp;ldquo;We want to believe!&amp;rdquo;.</description>

¡Cuánto sufrimos, Martín!

CuántoSufrimosMartín

¡Cuánto sufrimos, Martín! Podcast. S08E09

FEB 16, 2024211 MIN
¡Cuánto sufrimos, Martín!

¡Cuánto sufrimos, Martín! Podcast. S08E09

FEB 16, 2024211 MIN

Description

Como dijo el profeta Rodolfo Bodipo, &iexcl;arriba los corazones! &iexcl;Cu&aacute;nto sufrimos, Mart&iacute;n! Podcast dice adi&oacute;s al miedo, au revoir a la cautela, auf wiederhesen a la desconfianza, hello happiness y goodbye loneliness. Ser&aacute; la vitamina C de la pi&ntilde;a, ser&aacute; su aroma tropical, ser&aacute; la perspectiva de un saltito sin fin, ser&aacute; reconocerse en posadolescentes blanquiazules que se disparan como balas por las bandas de Riazor y se besan el escudo, ser&aacute; una enajenaci&oacute;n transitoria causada por tantos momentos de desasosiego o ser&aacute; que con el paso de los a&ntilde;os uno es m&aacute;s consciente de que los breves momentos de felicidad plena no se cuestionan: se disfrutan duren lo que duren. &iquest;Qu&eacute; ha cambiado aqu&iacute; para que el m&aacute;s mustio de los Deportivos, acaso el peor que recuerden los archivos polvorientos de la D&eacute;porcueva secreta de Rub&eacute;n Ventureira, se haya transformado en el equipo m&aacute;s en racha del f&uacute;tbol continental hasta el punto de que si ma&ntilde;ana un directivo de la UEFA se emborracha con Bitter Kas y le concede un puesto en las rondas eliminatorias de la Champions League, es muy capaz de destrozar cualquier l&oacute;gica, despachar al Manchester City con la misma suficiencia con la que golea a todo un Fuenlabrada y a toda una SD Logro&ntilde;&eacute;s (no hay rival peque&ntilde;o) y alzarse con la Copa? Ojal&aacute; que lo que haya cambiado sea la suerte pues las desgracias recientes de El Mejor Club del Mundo (marca registrada) no se pueden explicar totalmente por la impericia competitiva y s&iacute;, en un porcentaje alto, por una fatalidad continuada que solo puede ser el reverso a tanto gozo vivido en las d&eacute;cadas anteriores. Por eso cuando sale cara ya no se puede pensar en que en la pr&oacute;xima tirada de la moneada tal vez asome la cruz: hay que abrirse la camisa y recibir toda esta alegr&iacute;a en el pecho. Benjam&iacute;n y Manuel, ebrios de gozo, eligen creer, eligen una racha hist&oacute;rica, eligen un ascenso para las &eacute;pocas, eligen una Coru&ntilde;a convertida en capital mundial de la pi&ntilde;a, eligen unos meses de eterno carnaval y eligen no perder un solo segundo en razonar que quiz&aacute;s no hay que venirse tan arriba tan pronto. Pero como dice el meme de Internet en el que alguien cierra con sus dedos los labios de una persona dispuesta a criticar, &ldquo;let people enjoy things&rdquo; (o &ldquo;dejad que los chicos camelen&rdquo;, en fariense). &iquest;Que le dimos al bot&oacute;n de grabar y acto seguido el D&eacute;por Juvenil fue derrotado en una isla sin nombre? &iquest;Que tenemos una genitalia hipertrofiada por atrevernos a publicar esto antes de medirnos al Tarazona y arriesgar una deportiveada? Pues puede ser. Pero dejen a estos pollaviejas sabrosones disfrutar mientras saludan al platillo volante en forma de anan&aacute;s y gritan &ldquo;We want to believe!&rdquo;.